Los dos detergentes naturales por excelencia para limpiar las juntas de los azulejos de cerámica o gres son el bicarbonato y el agua oxigenada.

Todos sabemos que las mayores ventajas de los pavimentos de gres, cerámica o porcelanato es que ofrecen unas excelentes prestaciones en cuanto a durabilidad y resistencia y no requieren complicadas labores de mantenimiento ni de limpieza. Mucho tiempo después de la instalación, sin embargo, podría ser necesario dedicar un tiempo para limpiar las juntas de los azulejos de cerámica, que debido a la acumulación de suciedad y la absorción de polvo por parte del estuco, podrían tomar un color más oscuro o diferente del elegido en un principio.

Una buena limpieza permitirá que las juntas recuperen su color real y los suelos recobren su belleza original.

Los elementos indispensables para limpiar las juntas de los azulejos de cerámica son:

  • Bicarbonato;
  • Agua oxigenada de ciento treinta volúmenes (se puede comprar en cualquier droguería o ferretería);
  • Cepillo de dientes;
  • Esponja con un lado ligeramente abrasivo;
  • Agua caliente;
  • Guantes de goma.

El esfuerzo que exigirá la limpieza dependerá del grado de suciedad de las juntas, sobre todo en ámbitos húmedos como el baño y la cocina.

Para limpiar las juntas de los azulejos de cerámica se puede empezar diluyendo algo de bicarbonato en agua caliente abundante y frotar bien las juntas, en primer lugar con la esponja y a continuación con el cepillo de dientes.

El cepillo de dientes resulta especialmente eficaz para llegar a los rincones de más difícil acceso y para las partes más ennegrecidas. El agua oxigenada puede substituir o completar la acción del bicarbonato para asegurar una limpieza más profunda y eficaz. Como el bicarbonato, tiene que diluirse en agua caliente y, para evitar quemaduras, debe utilizarse protegiendo las manos bien enfundadas en guantes de goma.

Al término de la limpieza profunda de las juntas, toda la superficie del pavimento (o del revestimiento, en el caso de la parte interior de la ducha, por ejemplo) se podrá limpiar con un detergente normal. Después, para que se seque, se aireará la habitación dejando las ventanas abiertas de par en par.

Si se encuentran entre los afortunados propietarios de un electrodoméstico profesional de vapor, tengan en cuenta que puede constituir un valioso aliado en la limpieza de las juntas. Así es, se trata de otro remedio superecológico para dar brillo a las juntas y los azulejos.

Finalmente, una recomendación sobre los productos químicos para la limpieza de las juntas (en el mercado los hay de pasta o esmalte): con el fin de no dañar la superficie, han de emplearse siguiendo las instrucciones que el fabricante indica en la etiqueta.